lunes, 14 de junio de 2010

Y ¿por que no? otra tarea

El tema fue:

Imaginar que le prohíben a uno todos los gestos de apuro y desamparo (jugar con el cierre del reloj, abrocharse y desabrocharse los botones de la camisa, pasarse la mano por el pelo) de modo que al final uno no tenga donde aferrarse.

Y lo que escribí fue:

Acudí desesperadamente al psicólogo, el miedo, la desesperación, los dolores de cabeza, el delirio de persecución, el sudor de manos, la sensación de ardor en la cara y otros males difíciles de explicar; se intensificaban cada vez más. Quise explicarle lo que me pasaba, intenté dar por mi cuenta una explicación razonable; nada pudo despertar a mi cerebro agotado y confundido; las palabras también se traicionaron entre sí.

Finalmente no hubo diagnostico, el doctor no supo explicar lo que me pasaba, recomendó evitar las manías: no más rascarse la cabeza desesperadamente; no más morderse las uñas; no más pellizcarse las orejas; y no más revisar que todo este en su lugar antes de salir de la casa. Todas las restricciones incluían una gran dosis de medicamentos que no hacían mas que mantenerme en un estado somnoliento veintidós de veinticuatro horas. Las dos horas restantes me amarraba a la cama para evitar las manías; veía las grietas formadas en el techo, hasta que fuera hora de tomar la siguiente dosis.

Hoy no pude pagar el total de los medicamentos, el señor de la farmacia no quiso prestarme más dinero, y me pidió que le pagara cuanto antes el total de mi deuda. Regresé a mi casa, no se como llegué hasta aquí. La desesperación aumento. Comencé a rascarme las pantorrillas tanto que al pasar mis uñas por las llagas, se quedan manchadas de la sangre que me he logrado desprender.

Aún tengo un frasco lleno de pastillas, no se cual de los males ayude supuestamente a disminuir, pero se que me tomaré el frasco completo y espero que ayude a disminuir todos los males que me aquejan.

¡Feliz día de la paranoia!

lunes, 7 de junio de 2010

Otra tarea

A falta de imaginación para publicar algo en el blog, dejo mi tarea ¿va?

Tema: Dos personas que fueron pareja, se dejaron de ver y se reencuentran en un lugar.

Ricardo esta en un café en el centro de la ciudad; revisa el periódico mientras toma toma una taza de café y fuma un cigarro.
Diana se acerca a la puerta del café, observa los periódicos y reconoce a Ricardo que esta sentado en una mesa del fondo. Decide acercarse.
-¿Y desde cuando lees el periódico?
Ricardo levanta la cabeza y no puede disimular el sonrojo en su cara al verla.
-Fue lo único bueno que aprendí de ti - regresa su mirada al periódico.
Diana se sienta en la mesa y ordena un té.
-No te invite a sentarte, y me molesta el olor del té; puedes irte cuando lo traigan.
-¿Te molesta el olor o yo?
-Los dos, pero me molesta más tu presencia: vete.
-¿Cómo esta tu hermana?, ¿Me regalas de tu cigarro? - Fuma de él sin esperar respuesta.
-Mejor, ya no se acuerda de ti. Se que no te iras, yo si: se me hace tarde.
-¡Ja!, ¿Se te hace tarde?, ¿Que vas a hacer?, ¿Dormir?
-Si, y sin ti es mejor.
Ricardo se levanta de la mesa, recoge el periódico, se miran fijamente; la besa en la frente y le dice:
-Te odio.
Diana sonríe y contesta:
-Yo siempre te odie, que descanses.
Llega el té de Diana, mientras ella observa a Ricardo salir del café; suelta una pequeña carcajada y finalmente se concentra en su té.

¡Feliz día de las piernas de marmol!